El Esófago de Barrett es una condición definida por la presencia de epitelio columnar metaplásico sustituyendo epitelio escamoso en el esófago. Dicho cambio histológico es fruto de la presencia mantenida en el tiempo de reflujo gastroesofágico (enfermedad por reflujo gastroesofágico-ERGE). Una de las características del Esófago de Barrett es que predispone a un riesgo aumentado de desarrollar adenocarcinoma esofágico, una neoplasia con una incidencia creciente en el mundo occidental y asociada a un mal pronóstico en fases avanzadas. Se estima que la incidencia anual de adenocarcinoma entre población con Esófago de Barrett es del 0,1 al 2%, 30 veces mayor que la población general.
El Esófago de Barrett es particularmente frecuente en hombres de raza blanca, con cierto grado de obesidad y con historia de pirosis (enfermedad por reflujo gastroesofágico) de larga evolución. La detección del Esófago de Barrett es particularmente importante de cara a poder realizar un adecuado seguimiento a largo plazo y poder detectar precozmente formas iniciales de displasia/adenocarcinoma> mediante gastroscopia. En los últimos años se han desarrollado técnicas de tratamiento endoscópico de formas precoces de displasia/adenocarcinoma sobre Esófago de Barrett, que permiten una curación total de la enfermedad y la reducción en el riesgo posterior de desarrollar nuevas neoplasias. Entre ellas destacan especialmente la mucosectomía endoscópica y la ablación endoscópica por radiofrecuencia.