“Un mejor conocimiento de la biología tumoral permite no sólo comprender por qué aparece esta enfermedad, sino que también abre posibles vías para el tratamiento”, asegura el Dr. Adolfo de la Fuente, médico adjunto al Servicio de Hematología de MD Anderson Madrid – Hospiten y codirector del congreso, en colaboración con el Dr. Miguel Ángel Sanz, del Hospital Universitario La Fe de Valencia. El facultativo afirma que “los avances logrados para identificar alteraciones tanto genéticas, epigenéticas como moleculares en las células leucémicas posibilitan nuevas opciones de tratamiento, mejorando el pronóstico de los pacientes”.
El papel de los nuevos tratamientos ya disponibles y el de los fármacos aún en proceso de desarrollo constituyen precisamente las principales novedades que se abordan en este nuevo simposio sobre Leucemia Aguda, cuya periodicidad anual ha ido dotando a este evento de una gran relevancia en su campo.
Profesionales del sector como la Dra. Raquel de Oña -jefa del servicio de Hematología de MD Anderson Madrid – Hospiten- o el Dr. Ángel Martínez -del laboratorio de citogenética del mismo centro-, debatirán durante la jornada los nuevos avances científicos en el terreno de la hematología junto a otros destacados profesionales internacionales, como el Profesor Franceso LoCoco -de la University Tor Vergata of Rome, Italia- o el Dr. Hervé Dombret, del Saint Louis Hospital de Paris, Francia.
“Los planteamientos e ideas que presentan nuestros colegas extranjeros nos ayudan a enfocar la cuestión desde un punto de vista más amplio, teniendo en cuenta los procederes, avances y técnicas que se han logrado en otros países”, asegura el Dr. de la Fuente.
La mejora en los cuidados de soporte, sobre todo en el marco del trasplante de médula ósea, permite en la actualidad una mayor tasa de supervivencia en los pacientes diagnosticados de leucemia.
En el caso de los adultos, “la leucemia aguda resulta probablemente la entidad en la que el trasplante de progenitores hematopoyéticos tiene más relevancia, y los avances en cuanto a regímenes de acondicionamiento, fuente de progenitores y cuidados de soporte tienen un papel fundamental a la hora de mejorar las expectativas de supervivencia de los pacientes con leucemia aguda”, asevera el Dr. Adolfo de la Fuente.
No obstante, a pesar de los importantes avances médicos que se han logrado a lo largo de los últimos años, los especialistas reconocen que aún quedan importantes retos a los que hacer frente: “Necesitamos avanzar en el manejo de los pacientes en edad avanzada o frágiles”, advierte el doctor.
Otros aspectos destacados que se tratan a lo largo del simposio son el tratamiento de rescate de pacientes en recaída o refractarios y la importancia de los factores de pronósticos y sus posibles opciones terapéuticas, así como también el tratamiento de la leucemia linfoblástica en el adulto y las nuevas estrategias y agentes terapéuticos.
La leucemia es un cáncer que se desarrolla en el tejido hematopoyético -encargado de formar la sangre-, como la médula ósea. La clasificación de los distintos tipos de leucemia se realiza según la variedad de célula sanguínea afectada y la velocidad de crecimiento celular. En concreto, la leucemia puede ser aguda o crónica.
Una leucemia aguda consiste en un crecimiento rápido y excesivo de células sanguíneas inmaduras, denominadas blastos. Esta enfermedad es mortal en ausencia de tratamiento, ya que ocasiona el fracaso de la hematopoyesis normal ocasionando complicaciones como la aparición de anemia, infecciones y hemorragias.
El diagnóstico de la leucemia aguda se establece cuando hay un 20% o más de blastos en la médula ósea. La leucemia linfoblástica aguda (LLA) es más frecuente en la infancia y al comienzo de la edad adulta, aunque también se diagnostica en adultos. Por su parte, la leucemia mieloide aguda (LMA) es más habitual en adultos.