Madrid, 20 de junio de 2024-. El Servicio de Cirugía de Cabeza y Cuello de MD Anderson Cancer Center Madrid – Hospiten está dedicado a los cánceres de esta zona desde hace más de dos décadas. Esta Unidad, que acaba de incorporar la cirugía robótica a su arsenal terapéutico de la mano del Dr. Rafael Barberá, se ha consagrado como un auténtico referente dentro del abordaje de este tipo de tumores con este método, lo que permite a los cirujanos realizar procedimientos complejos con mayor precisión, flexibilidad y control en comparación con las técnicas convencionales.
Así lo apunta el Dr. Eduardo Raboso, jefe de Servicio de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello de MD Anderson Madrid – Hospiten, quien subraya el potencial de la cirugía robótica, siempre empleada de acuerdo con los protocolos internacionales. “La inclusión de la cirugía robótica completa el amplio abanico terapéutico con el que contamos dentro de nuestra Unidad. Es una herramienta más que se emplea cuando es necesario y siempre aplicada dentro de los parámetros de la excelencia”, incide.
“Existen determinados tumores en los que la cirugía robótica no es la opción preferente porque se curan completamente con otro tipo de abordajes como la quimioterapia o la radioterapia”, agrega, destacando que, en muchas ocasiones, es el paciente el que escoge qué tratamiento es de su preferencia.
Las opciones curativas de los tumores de cabeza y cuello en muchas ocasiones pasan por decidir entre la opción quirúrgica de entrada o tratamientos basados en la quimio y radioterapia. Es dentro del Comité Multidisciplinar de Tumores de Cabeza y Cuello donde se evalúa cuál es la mejor opción terapéutica para cada caso desde la perspectiva de todas las especialidades con competencia en el caso. La incorporación de la cirugía robótica supone una mejora en la calidad de los tratamientos que se ofrecen a los pacientes.
La cirugía robótica permite la resección de tumores con un abordaje menos invasivo que la cirugía convencional manteniendo los mismos resultados oncológicos, pero mejorando significativamente los resultados funcionales que van a permitir una mejora en la calidad de vida del paciente.
Tiroides, laringe, faringe, fosas nasales, cavidad oral y base del cráneo, tumores de cabeza y cuello más frecuentes
El Servicio de Cirugía de Cabeza y Cuello de MD Anderson Madrid – Hospiten realiza más de 300 operaciones anuales. Dentro de esta especialidad, el Dr. Raboso explica que los tumores más comunes que tratan en la Unidad son los de tiroides, que aparecen cuando las células de esta glándula crecen de manera incontrolable. También son muy frecuentes los tumores de laringe y faringe en los que, recalca, el principal factor de riesgo es el tabaco, así como los de la cavidad oral, fosas nasales y los de la base del cráneo.
El riesgo de padecer ciertos cánceres de cabeza y cuello puede reducirse adoptando determinados hábitos de vida. Otros factores de riesgo se atribuyen al ambiente y no pueden modificarse ni controlarse. Sin embargo, elconsumo de tabaco(incluidos cigarrillos, puros, pipas o tabaco de mascar) yalcoholson las dos causas más frecuentes decáncer de cabeza y cuello. El virus del papiloma humano (VPH), una higiene bucal deficiente o la inhalación de polvo níquel metálico también se presentan como factores de riesgo importantes.
“En la Unidad recibimos pacientes desde otros centros que presentan una gran complejidad quirúrgica, dado que son varios los factores a tener en cuenta. No solo necesitas una instrumentación muy solvente, sino también una infraestructura hospitalaria multidisciplinar muy amplia y sólida para poder llevar a cabo un abordaje completo”, concluye.
El eje del diseño del tratamiento es siempre el paciente. Se tiene en cuenta variables como los tratamientos recibidos, estado general de salud y estilo de vida del paciente. “Hay pacientes que necesitan hablar mucho y entonces no quieren que se les intervenga en las cuerdas vocales, por lo que se apuesta por la radioterapia. Sin embargo, otros necesitan una solución inmediata y no puede esperar los meses de duración de la radioterapia, así que optan por la operación quirúrgica. Los resultados terapéuticos son tan sobresalientes que ofrecemos al paciente la posibilidad de elegir entre diferentes opciones y siempre velando por la mejor solución para su enfermedad”, incide el especialista.